La Paz, 12 jul (ABI).- El Gobierno boliviano aseguró el domingo que los asentamientos humanos en regiones remotas y deshabitadas, como el que se producirá en el departamento amazónico de Pando, son parte de una política de Estado, para sacar de la pobreza a los pueblos .
"Los asentamientos humanos son una política de Estado y es parte del Plan Nacional de Desarrollo, por tanto, no es una medida caprichosa del Gobierno", revalidó el ministro de la Presidencia, Juan Ramón Quintana en un encuentro con los periodistas.
El funcionario aseguró que el asentamiento en Pando fue proyectado en 2008, luego de que en esa región concluyó el proceso de saneamiento, una de las condiciones principales para ejecutar este tipo de programas que se implantarán también, de manera gradual, en otros departamentos del país.
Quintana explicó que ese asentamiento humano fue retrasado "por la acción genocida-criminal de la prefectura de Pando, del Comité Cívico y los latifundistas pandinos que promovieron la masacre de Porvenir, el 11 de septiembre de 2008".
El Ministro de la Presidencia descartó, de esa manera, las acusaciones de algunos sectores de la oposición que imputaron al Ejecutivo de trasladar gente a Pando, sólo con un objetivo electoral, de cara a las elecciones generales de diciembre próximo.
Al contrario, Quintana denunció que "algunos sectores avalados por empresarios de la región quieren obstaculizar el plan de asentamientos humanos porque temen perder sus concesiones forestales".
"Si el manejo de concesiones forestales se ajusta a lo que señala la ley no tienen nada que perder o temer a la política de asentamientos humanos", argumentó.
Insistió en que es "desafortunado" lo que creen esos sectores porque sólo se preocupan de un supuesto quiebre del empate electoral, sin considerar la soberanía y la capacidad de cada ciudadano para elegir la forma política que le conviene o le interesa.
"El hecho de decir que las 2.000 personas que se asentaran en esa región pandina votarán por el MAS es una actitud del mayor desprecio colonial sobre estos ciudadanos a quienes el Estado, no el Gobierno, está beneficiando con tierras", subrayó.
Recordó que en la década del 50 y 70 se llevaron adelante otros procesos de colonización en los departamentos de Santa Cruz y en el Norte de La Paz, "y no necesariamente los beneficiados votaron por el Movimiento Nacionalista Revolucionario (MNR)".
En esa dirección aseguró que los asentamientos humanos del Plan Nacional de Desarrollo, tienen como componente esencial, la estrategia de distribución justa, equitativa y necesaria de tierras a los bolivianos que no la poseen.
Insistió en que la política de distribución de tierras y asentamientos humanos tiene que ver con la estrategia de luchar contra la extrema pobreza, con equidad y justicia.
"No dejaremos la pobreza mientras no tengamos acceso a los instrumentos de trabajo y la herramienta más importante para tener trabajo que es el acceso a la tierra", apuntó Quintana.
El Ministro de la Presidencia dijo que todos los pandinos recibieron 500 hectáreas por familia, y que, en consecuencia, se entregará tierras a los que nunca la tuvieron, comunidades y pueblos indígenas.
Dijo que la revolución agraria, que desgaja la descolonización de la política agraria tradicional comprende el desarrollo productivo, la redistribución de tierras, el fomento a las actividades productivas de las comunidades y que no es una política concentrada sólo en un departamento, sino es nacional.
Quintana recordó que la distribución de tierras fiscales y el fomento a nuevos asentamientos humanos se ejecuta desde 2006, en un plan que se inició en Tarija, a la que los departamentos de Pando, Beni Santa Cruz y La Paz.
"Los asentamientos humanos son una política de Estado y es parte del Plan Nacional de Desarrollo, por tanto, no es una medida caprichosa del Gobierno", revalidó el ministro de la Presidencia, Juan Ramón Quintana en un encuentro con los periodistas.
El funcionario aseguró que el asentamiento en Pando fue proyectado en 2008, luego de que en esa región concluyó el proceso de saneamiento, una de las condiciones principales para ejecutar este tipo de programas que se implantarán también, de manera gradual, en otros departamentos del país.
Quintana explicó que ese asentamiento humano fue retrasado "por la acción genocida-criminal de la prefectura de Pando, del Comité Cívico y los latifundistas pandinos que promovieron la masacre de Porvenir, el 11 de septiembre de 2008".
El Ministro de la Presidencia descartó, de esa manera, las acusaciones de algunos sectores de la oposición que imputaron al Ejecutivo de trasladar gente a Pando, sólo con un objetivo electoral, de cara a las elecciones generales de diciembre próximo.
Al contrario, Quintana denunció que "algunos sectores avalados por empresarios de la región quieren obstaculizar el plan de asentamientos humanos porque temen perder sus concesiones forestales".
"Si el manejo de concesiones forestales se ajusta a lo que señala la ley no tienen nada que perder o temer a la política de asentamientos humanos", argumentó.
Insistió en que es "desafortunado" lo que creen esos sectores porque sólo se preocupan de un supuesto quiebre del empate electoral, sin considerar la soberanía y la capacidad de cada ciudadano para elegir la forma política que le conviene o le interesa.
"El hecho de decir que las 2.000 personas que se asentaran en esa región pandina votarán por el MAS es una actitud del mayor desprecio colonial sobre estos ciudadanos a quienes el Estado, no el Gobierno, está beneficiando con tierras", subrayó.
Recordó que en la década del 50 y 70 se llevaron adelante otros procesos de colonización en los departamentos de Santa Cruz y en el Norte de La Paz, "y no necesariamente los beneficiados votaron por el Movimiento Nacionalista Revolucionario (MNR)".
En esa dirección aseguró que los asentamientos humanos del Plan Nacional de Desarrollo, tienen como componente esencial, la estrategia de distribución justa, equitativa y necesaria de tierras a los bolivianos que no la poseen.
Insistió en que la política de distribución de tierras y asentamientos humanos tiene que ver con la estrategia de luchar contra la extrema pobreza, con equidad y justicia.
"No dejaremos la pobreza mientras no tengamos acceso a los instrumentos de trabajo y la herramienta más importante para tener trabajo que es el acceso a la tierra", apuntó Quintana.
El Ministro de la Presidencia dijo que todos los pandinos recibieron 500 hectáreas por familia, y que, en consecuencia, se entregará tierras a los que nunca la tuvieron, comunidades y pueblos indígenas.
Dijo que la revolución agraria, que desgaja la descolonización de la política agraria tradicional comprende el desarrollo productivo, la redistribución de tierras, el fomento a las actividades productivas de las comunidades y que no es una política concentrada sólo en un departamento, sino es nacional.
Quintana recordó que la distribución de tierras fiscales y el fomento a nuevos asentamientos humanos se ejecuta desde 2006, en un plan que se inició en Tarija, a la que los departamentos de Pando, Beni Santa Cruz y La Paz.
Texto: ABI
Foto: commons.wikimedia.org
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