Entre 1953 y 2002 se distribuyeron aproximadamente 987 mil hectáreas de tierra en el departamento de Pando. La repartija fue particularmente intensa en la dictadura de Hugo Banzer y en el gobierno de la alianza MIR-ADN de Jaime Paz y Banzer.
Se repartieron más de 286 mil hectáreas de tierra en Pando (28%) en el período 1969 - 1978, y 522 mil hectáreas (53%) en el quinquenio 1989-1993. Los grandes empresarios recibieron casi 691 mil hectáreas, el 70% de la tierra distribuida entre 1953 y 2002, y los medianos empresarios obtuvieron 127 mil hectáreas, el 13%, según un informe preliminar del INRA.
Según la Superintendencia Forestal, en 1997 los madereros afiliados a la Cámara Forestal de Pando habían suscrito 19 contratos de aprovechamiento forestal bajo la modalidad de Concesiones Forestales, sobre una superficie de 1,9 millones de hectáreas.
El gobierno constitucional de Banzer (1997-2001) reconoció a las barracas como concesiones de productos no maderables, vulnerando las leyes agrarias, con el objetivo de consolidar más de tres millones de hectáreas en beneficio de senadores, diputados y ministros barraqueros.
El movimiento campesino e indígena logró revertir el decreto barraquero de Banzer en julio de 2000. Posteriormente los terratenientes pandinos y el poder político intentaron modificar normas sobre patentes forestales y certificación de la Función Económica Social en beneficio personal, y pelearon por la desconcentración del INRA.
La alianza derechista Podemos, engendro político de ADN del ex dictador Banzer, reclutó a representantes de la elite empresarial del oriente en las elecciones de 2002, entre ellos Oscar Ortiz, ex gerente de la Cámara de Industria, Comercio, Servicios y Turismo de Santa Cruz (CAINCO), el ganadero Antonio Franco, ex dirigente de la Federación de Empresarios Privados de Santa Cruz en 2004; el ganadero beniano Walter Guiteras, el líder del movimiento terrateniente en el chaco cruceño Ronald Moreno, y Eliane Capobianco, ex funcionaria del INRA que legalizó decenas de haciendas en Santa Cruz.
En las filas de Podemos destacan el ex prefecto de Pando Leopoldo Fernández, dueño de 5.552 hectáreas; los senadores pandinos Roger Pinto, que tiene 3.269 hectáreas, y Paulo Bravo, poseedor de al menos 222 hectáreas; y la ex presidenta del Comité Cívico de Pando Ana Melena de Suzuki, dueña de 330 hectáreas.
La elite adenista/podemisma de Pando obtuvo enormes extensiones de tierra a título gratuito; se enriqueció con los favores políticos del Estado "centralista", se alió con sectores de la burguesía brasilera para explotar los recursos naturales de la Amazonía, e intentó conquistar la autonomía del departamento mediante un frustrado golpe civil.
Según la Superintendencia Forestal, en 1997 los madereros afiliados a la Cámara Forestal de Pando habían suscrito 19 contratos de aprovechamiento forestal bajo la modalidad de Concesiones Forestales, sobre una superficie de 1,9 millones de hectáreas.
El gobierno constitucional de Banzer (1997-2001) reconoció a las barracas como concesiones de productos no maderables, vulnerando las leyes agrarias, con el objetivo de consolidar más de tres millones de hectáreas en beneficio de senadores, diputados y ministros barraqueros.
El movimiento campesino e indígena logró revertir el decreto barraquero de Banzer en julio de 2000. Posteriormente los terratenientes pandinos y el poder político intentaron modificar normas sobre patentes forestales y certificación de la Función Económica Social en beneficio personal, y pelearon por la desconcentración del INRA.
La alianza derechista Podemos, engendro político de ADN del ex dictador Banzer, reclutó a representantes de la elite empresarial del oriente en las elecciones de 2002, entre ellos Oscar Ortiz, ex gerente de la Cámara de Industria, Comercio, Servicios y Turismo de Santa Cruz (CAINCO), el ganadero Antonio Franco, ex dirigente de la Federación de Empresarios Privados de Santa Cruz en 2004; el ganadero beniano Walter Guiteras, el líder del movimiento terrateniente en el chaco cruceño Ronald Moreno, y Eliane Capobianco, ex funcionaria del INRA que legalizó decenas de haciendas en Santa Cruz.
En las filas de Podemos destacan el ex prefecto de Pando Leopoldo Fernández, dueño de 5.552 hectáreas; los senadores pandinos Roger Pinto, que tiene 3.269 hectáreas, y Paulo Bravo, poseedor de al menos 222 hectáreas; y la ex presidenta del Comité Cívico de Pando Ana Melena de Suzuki, dueña de 330 hectáreas.
La elite adenista/podemisma de Pando obtuvo enormes extensiones de tierra a título gratuito; se enriqueció con los favores políticos del Estado "centralista", se alió con sectores de la burguesía brasilera para explotar los recursos naturales de la Amazonía, e intentó conquistar la autonomía del departamento mediante un frustrado golpe civil.
Texto: BOLPRESS
Foto: www.boliviahoy.com
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